Elegir la ropa interior que mejor le sienta a cada una puede ser una ardua tarea. Solemos dejar de lado esta parte de nuestro atuendo, porque no es visible para el resto del mundo. Quizás variamos los colores y elegimos la tela que más cómoda nos resulta. Pero dejamos de lado muchas otras consideraciones: directamente no nos tomamos el tiempo y el esmero de elegirla.
Sin embargo, cuando estamos pareja o queremos conseguir una, se vuelve un elemento fundamental y al que le prestamos mucha más atención.
Hay varias cuestiones a tener en cuenta a la hora de comprar. Los objetivos que se deben tener en mente son tres: comodidad, sensualidad y estilo.
La cuestión de la comodidad es esencial: no hay nada peor que llevar ropa interior que deje marcas, pique o deba ser acomodada todo el tiempo. La ropa íntima ideal es aquella que nos hace olvidar que la llevamos puesta.
La tela ideal es el algodón: permite la respiración y no produce alergias cutáneas.
Si quieres ser sensual, no hay nada más sexy que un conjunto de encaje, de color negro, blanco o natural. La piel más deseada es la que se insinúa, la que no se muestra por completo. Las transparencias son otra opción infalible. En cuanto a las telas, el raso y el satén son las elegidas por excelencia para vivir una noche inolvidable…
A continuación te damos una lista con los distintos tipos de ropa interior, para que conozcas sus características y elijas el más adecuado.
Sujetadores o corpiños: Es fundamental que elijas el número correcto. No debe ir ni muy apretado ni tampoco flojo.
- Corte amplio y con encajes: es ideal para colocarse debajo de un escote cuadrado y amplio.
- Con efecto push-up: es ideal para aquellas que no tienen mucho busto, o que lo quieren centrar y realzar.
- Moldeado: se utiliza cuando se desea llevar prendas ajustadas. Brinda un efecto “cirugía” sin tenerla y redondea el pecho.
- Bustier: para las noches sexies. Es un sostén que se extiende hasta la cadera.
- Con arco: sujeta, levanta y da forma.
- Bandau: sin breteles o breteles removibles. Ideales para utilizar con prendas sin hombros.
- Reductor: es la opción para aquellas que tienen mucho busto y quieren disimularlo.
- Deportivo: sujeta correctamente el busto y sus anchos breteles contribuyen al sostén del cuerpo y resistencia. El algodón con que están hechos absorbe la transpiración.
Bragas o bombachas:
- Tanga: la más usada por las mujeres, para que no se note con la ropa y por comodidad, pero hay que tener cuidado con las infecciones vaginales, sobre todo en verano. Si tus caderas son anchas, no las elijas: visualmente engordan la figura.
- Vedetina: la tradicional bikini, pequeña pero sin llegar a ser tanga.
- Culotte: parecido a un mini-short, se usa cuando queremos reducir visualmente el tamaño del trasero o cuando usamos un pantalón deportivo tiro bajo y deseamos que se note el elástico. Muy cómodos, ideales para practicar deportes. También son recomendables si tienes panza, ya que el tiro alto del culotte en parte servirá para retenerla.
- Hilo dental: para las más osadas. Más delgada que la tanga: tiene casi nada de tela por detrás.
Ahora que ya sabes lo que hay disponible, deja guiar tu imaginación y elije prendas íntimas para cada ocasión…
Fuente: www.belleza-mujer.net
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