Un toque ‘real’, en forma de burbujas de oro: de este modo se presenta Dom Pérignon Wedding, el lanzamiento más ‘nupcial’ de los exclusivos espumosos producidos por Moët & Chandon, pensado en exclusiva para las parejas que busquen poner una pizquita de lujo de lo más chic a su banquete de bodas.
Cada set de Dom Pérignon Wedding, que se puede encargar directamente a través de su tienda on-line, incluye doce botellas de Dom Pérignon Vintage 2000, una de las cosechas más simbólicas de la década, y que enmarcan a la perfección a una decimotercera, pensada, quizá, para que los novios la guarden para la intimidad o como símbolo de su unión en el primer aniversario. Esta última botella, que viene encerrada en una exquisita caja de madera lacada en blanco, luce una etiqueta única en color plata, con los nombres de la pareja y la fecha del enlace grabados. Un hito en la historia de la maison, que por primera vez en sus casi cien años de historia, se deja llevar por la pasión del momento, permitiendo a parejas de todo el mundo personalizar sus exclusivas botellas, tal y como sucediera con el champán añejo servido durante la boda de Lady Diana Spencer y el Príncipe Carlos de Inglaterra en 1981.
Como imagen de campaña, en lugar de decantarse por una sesión con la top más de moda del momento, la casa francesa ha apostado por perpetuar el sabor vintage de las botellas, escogiendo de su archivo personal una fotografía nunca vista de Claudia Schiffer junto a Sebastien Jondeau, tomada hace algunos años por el diseñador Karl Lagerfeld. La modelo, que es una fan reconocida de la casa de espumosos, ha sido una de las muchas celebrities que escogió brindar en su propia boda con una selecta botella del champán francés más famoso y elegante del mundo.
Fuente: http://www.hola.com/
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